Relojes alemanes

Cuando se trata de relojes de alta calidad y especialmente elegantes, es inevitable que se tenga en cuenta el origen del fabricante.

Sobre todo porque los relojes de los fabricantes suizos se han ganado con razón el estatus de «crème de la crème de la haute horlogerie» a lo largo de los años.

Ni que decir tiene que el término «Swiss made» se ha convertido en sinónimo de marcas relojeras excepcionales mezcladas con una cierta dosis de prestigio.

La artesanía teutona

Desde la reunificación de Alemania en 1990, las empresas con sede en Deutschland han podido ponerse al día poco a poco con las innovaciones técnicas, así como con los diseños y el refinamiento del gusto que han caracterizado a muchos relojes suizos.

Hoy honramos a Alemania y con razón: es (en nuestra opinión) la segunda cuna de la relojería.

Mientras que el arte relojero suizo nació para aprovechar los duros inviernos de los agricultores suizos, que así adquirieron conocimientos técnicos diferentes de un valle a otro.

Los relojeros alemanes, por su parte, se sintieron liberados después de haber sido destruidos por la primera y segunda guerra mundial y la era soviética hasta el año 1990, desatando de este modo de manera explosiva todo su potencial creativo.

Alemania se ha convertido en uno de los otros países de la industria relojera con sus prestigiosas marcas que los fanáticos de los calibres automáticos de fabricación están deseando.

Pero también es un país que ofrece relojes automáticos de alta calidad que son más accesibles que nuestros amigos relojeros suizos.

En este pequeño artículo, cruzaremos el Rin para descubrir algunas marcas que merecen una visita y que ofrecen relojes realmente interesantes.

Principales marcas de relojes alemanes

La marca «Made in Germany» por fin ha logrado imponerse en el competitivo mercado de los relojes, mientras que cierra la brecha con las marcas suizas ya consolidadas.

Teniendo esto en cuenta, aquí encontrarás un listado de los mejores relojes alemanes más importantes.

Esto, por supuesto, es una cuestión de preferencia, ya que es imposible cubrir todos los aspectos relacionados con el gusto individual de cada uno o la afinidad por una marca específica.

Nos centraremos menos en los fabricantes procedentes de los Alpes y más en el camino que conduce directamente a la Selva Negra. También vamos a echar un vistazo más de cerca a la región del sur de Erzgebirge en Alemania.

Sin embargo, antes de visitar al fabricante en Saxon Glashütte, nos dirigimos primero al centro de Alemania, donde el skyline de rascacielos de los bancos es visible desde lejos y que señala el primer destino en nuestra lista: la ciudad de Frankfurt am Main.

Dufa

DuFa se fundó en 1920 en Leipzig (Alemania), a partir de la abreviatura «Deutsche Uhrenfabrik», que significa «Manufactura alemana de relojes».

Ha perdurado a lo largo de los años y ahora forma parte del grupo Dartmouth Brands.

Los relojes DuFa cuentan con una impecable precisión alemana y componentes de alta calidad. Estos relojes tienen un aspecto vintage modernizado y están inspirados en la Bauhaus.

Las diferentes colecciones llevan el nombre de las figuras históricas que dejaron su huella en este movimiento.

Déjate seducir por estos magníficos relojes DuFa y opta por un reloj de diseño refinado.

Stowa

Fundada en 1927 por Walter Storz, Stowa comenzó como fabricante de relojes mecánicos para el ejército alemán, especialmente para la marina y luego para la Luftwaffe.

Con sede en Engelsbrand, en el corazón de la Selva Negra, la marca fabricó relojes en pequeñas series en la línea de la tendencia Bauhaus en 1937, antes de producir los famosos relojes flieger a partir de 1940.

Después de un bombardeo en 1945 que destruyó completamente la fábrica, la actividad paró hasta 1951.

El hijo del fundador, Werner Storz, se hizo cargo de la empresa en 1963 y el primer reloj de buceo Seatime se presentó tres años más tarde.

En 1996, la marca la adquirió Jörg Schauer, quien se propuso revitalizarla para convertirla en la actual.

Stowa Pilot Automatic-self-Wind FI23883 - Reloj de pulsera para hombre (certificado prepropietario)

Junghans

La historia de Junghans es fascinante.

Fundada en 1861 en Schramberg por Erhard Junghans y su cuñado, la marca estrella experimentó un rápido ascenso desde sus comienzos, utilizando movimientos estadounidenses para convertirse en el mayor fabricante de relojes del mundo en 1903, produciendo más de 3 millones de relojes y dando empleo a casi 3.000 personas.

Incluso estructura sus talleres con un edificio diseñado en escalones para recibir la máxima luz diurna con el fin de ofrecer una precisión óptima a sus relojeros.

A partir de 1936, Junghans diseñó sus propios movimientos, en particular el calibre J80 dentro de la gama Meister, que sigue existiendo en la actualidad.

Su primer cronógrafo mecánico fue creado en 1949 y su primer movimiento cronómetro certificado en 1957.

A partir de 1961, Junghans se asoció con el diseñador Max Bill para diseñar una gama de relojes al estilo Bauhaus que se convertiría en la colección insignia de la marca.

Apenas un año después de Seiko, los Junghans revelaron su primer movimiento de cuarzo, lo que le llevó al rango de cronometrador oficial de los Juegos Olímpicos de Munich de 1972.

En 1985, presentó el primer movimiento de cuarto de radio impulsado por el público en general y luego logró miniaturizarlo en un reloj en 1990, una primicia mundial.

Su historia es un testimonio de una constante búsqueda de innovación y precisión.

Laco

Esta marca fue fundada en Pforzheim en 1925 por Frieda Lacher y Ludwig Hummel bajo el nombre de Lacher&Co y posteriormente se dedicó a los movimientos suizos en el marco de los relojes fabricados en Alemania.

Consciente de las limitaciones de su dependencia de los suizos, Ludwig Hummel fundó Durowe (Deutsche Uhren-Rohwerke) en 1933 para ofrecer una alternativa a otros fabricantes alemanes al mismo tiempo que proporcionaba movimientos a Laco.

En 1940, la marca fue seleccionada de entre 5 fabricantes incluyendo Stowa, Wempe, IWC y A. Lange & Söhne producirá relojes de aviador para el ejército alemán.

El Ministerio de Aviación formuló especificaciones bajo el nombre FL23883, que estaba grabado en la parte posterior de la caja de cada reloj, frente a la corona.

Laco también fabricaba relojes de bolsillo para la marina y todos estaban equipados con un calibre Durowe D5. En 1959 y tras una fuerte caída de las ventas, la empresa fue vendida a la US Time Corporation (Timex), sobre todo por su progreso en el desarrollo de relojes electrónicos.

Rápidamente fue adquirida por el holding suizo Ébauches S.A., que se convirtió en ETA a raíz de varias fusiones.

En 1988, Horst Güntheren adquirió los derechos de uso de la marca para revivirla.

Hoy en día, Laco destaca por sus relojes Flieger, cuyo diseño es casi idéntico al original.

La marca también recibió el premio IF Design Award.

Sinn

Es una de nuestras marcas favoritas. Sinn fue fundado por Helmut Sinn, un piloto durante la Segunda Guerra Mundial, en 1961 en Frankfurt am Main.

Desde sus inicios, la marca se ha centrado en relojes utilitarios: relojes de navegación y cronógrafos de aviación.

En 1985, su modelo 140 S fue al espacio en la muñeca del profesor Reinhard Furrer durante la misión espacial D1, luego en 1992 con el 142 S en la muñeca del astronauta Klaus-Dietrich y en 1993.

El punto de inflexión se produjo en 1994 con la adquisición de la marca por parte del ingeniero Lothar Schmidt, que adoptó un enfoque de desarrollo tecnológico.

Las innovaciones son numerosas: resistencia a los campos magnéticos, tecnología de deshumidificación, hidrotecnología, resistencia a las temperaturas extremas (-45°C a +80°C), materiales sin lubricación DIAPAL, tecnología de endurecimiento TEGIMENT, etc.

La marca innova constantemente para ofrecer relojes ultrarresistentes con un acabado impecable y movimientos con complicaciones desarrollados internamente.

Sinn Arktis 206.012 Reloj mecánico (automático) para hombre con esfera azul (certificado de propiedad prefabricado)

Mühle-Glashütte

Los orígenes de Mühle-Glashütte se remontan a 1869. Fundada por Robert Mühle en el famoso pueblo de Glashütte en Alemania del Este, esta marca comenzó a fabricar instrumentos de medición para la industria relojera y en 1918 pasó a utilizar indicadores de velocidad, tacómetros y relojes para automóviles.

Entre las guerras y la era socialista, la empresa fue nacionalizada 3 veces.

En 1994, la empresa pasó a llamarse Mühle-Glashütte BmbH Nautische Intrumente und Feinmechanik y se especializó en la fabricación de instrumentos náuticos.

Los primeros relojes aparecieron en 1996 a petición especial de un astillero, una actividad que realmente se desarrolló a partir del año 2000.

En 2007, su vecino Nomos demandó a la marca por incumplimiento de la «regla de Glashütte», que estipula que la mitad del trabajo sobre los movimientos debe realizarse in situ para poder llevar el sello de la ciudad.

Un incumplimiento que causó graves daños a la empresa, que fue multada con 63 millones de euros y se declaró en quiebra.

La marca sigue recuperándose dolorosamente y ha dado a conocer su primer movimiento de fabricación real en 2011.

Mühle Glashütte ProMare Go

MeisterSinger

Es probable que en este momento sea la marca que te resulte más familiar.

Fundada en 2001 por Manfred Brassler, MeisterSinger es una empresa única que elabora sus relojes en la ciudad de Münster, en el noroeste de Alemania.

La característica principal de esta marca es que produce casi exclusivamente relojes monoaguja.

La idea es mostrar a los usuarios que lo importante es ofrecer de un vistazo la hora en lugar de preocuparse por el paso de los segundos.

Así es como los relojes de la Edad Media mostraban la hora.

Desde 2014, esta marca alemana también ha estado desarrollando sus propios movimientos y ahora está trabajando en el desarrollo de relojes utilitarios.

Tutima

Esta fábrica situada en Glashütte fue fundada indirectamente en 1927 cuando se crearon dos empresas relojeras: UROFA y UFAG.

El nombre «Tutima» se deriva de una palabra latina que significa «seguro, protegido» y se usó como una etiqueta que atestigua la más alta calidad de los relojes de ambas compañías.

Rápidamente solicitada para producir relojes piloto que pudieran ser utilizados en duras condiciones, siendo altamente legibles y sobre todo precisos, la compañía desarrolló cronógrafos equipados con el calibre 59 UROFA para el ejército alemán.

Hasta el final de la Segunda Guerra Mundial se produjeron más de 30.000 unidades, que ahora son muy apreciadas por los coleccionistas.

La ciudad de Glashütte fue destruida en gran parte por las tropas rusas, y lo poco que quedaba de ella fue nacionalizado unos años más tarde.

Sin embargo, muchos empleados y gerentes habían logrado llegar a Alemania Occidental y luego se reunieron en la ciudad de Ganderkesee para mantener vivo el espíritu de Glashütte.

En 1983, la marca firmó un contrato con la Fuerza Aérea Alemana, y en 1984, el cronógrafo militar ref. 798 fue elegido como reloj oficial de los pilotos de la OTAN, llevando la marca a nuevas cotas.

No fue hasta 2008 cuando se hizo el regreso a Glashütte, después de haber examinado la cuestión desde la caída del Telón de Acero, porque Tutima finalmente había echado raíces en Occidente.

Este es un nuevo capítulo para la marca, que ahora mira hacia el futuro, especialmente para el diseño de sus relojes.

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Nomos Glashütte

Es una marca relativamente joven, fundada en 1990, como muchos fabricantes alemanes.

Situada en el famoso pueblo de Glashütte, donde también se encuentran los talleres de otras marcas de renombre mundial de esta selección y donde viven algunos de los mejores relojeros del mundo, Nomos es hoy en día la mayor empresa de relojería mecánica de Alemania.

Cada reloj es diseñado en Berlín por su propia agencia de diseño y refleja un enfoque moderno y único.

La creatividad es la máxima expresión de la marca relojera y ha sido galardonada con premios internacionales (Red Dot Award, iF Design Award, Good Design Award, etc.) por 11 de sus modelos gracias a su enfoque innovador, su forma, su funcionalidad, su estética y sus notables cualidades.

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Montblanc

A pesar de su nombre francófono, Montblanc no es una marca francesa ni suiza.

Fundada en 1906 por un fabricante de papel, un banquero y un ingeniero, la compañía nació de un descubrimiento hecho en los Estados Unidos: una pluma estilográfica con su propio depósito y sin fugas.

Los fundadores adoptaron este mismo principio y luego elevaron el nivel de requisitos para utilizar el nombre Montblanc sólo a partir de 1910.

En 1977, la marca se convirtió en miembro del grupo Richemont, pero no fue hasta 1997 cuando se fundó el fabricante de relojes en Le Locle, en el Jura suizo, especialmente con el lanzamiento del modelo Meisterstück presentado en el SIHH.

Concede la misma importancia a la excelencia y al saber hacer, de ahí que la sede central de Le Locle sea tanto para su división de relojería como para sus instrumentos de escritura.

Así lo demostró en 2008 cuando presentó su primer movimiento real de fabricación, el calibre MB R100, que acciona un cronógrafo monopulsador.

Glashütte Original

La historia detrás de la aldea de Glashütte es muy particular, contar la historia de las fábricas debe tomarse con calma.

En particular, por la unificación de las fábricas de la ciudad, que se llevó a cabo en 1951.

Después de esa fecha, sólo había una empresa en la ciudad: VEB Glashütter Uhrenbetriebe (también llamada GUB).

Fue con la caída del muro y el retorno de la privatización que las marcas se desarrollaron allí y fueron capaces de trazar su propio camino.

A diferencia de las otras fábricas de la zona, Glashütte Original es el nombre adoptado por esta combinación en 1994, que luego se convirtió en una sociedad de responsabilidad limitada.

Y fue en el año 2000 cuando la marca se unió al Grupo Swatch.

Su particularidad: todos los movimientos se realizan en la más pura tradición relojera alemana.

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A. Lange & Söhne

Siguiendo el ejemplo de Patek Philippe, los relojes de A. Lange & Söhne son el Santo Grial para muchos aficionados.

Una de las marcas más antiguas de Glashhütte, fundada en 1845 por Ferdinand Adolph Lange y sus hijos Richard y Emil, produjeron los mejores relojes de bolsillo de la época.

Después de la Primera Guerra Mundial, viendo que los soldados volvían a mostrar sus muñecas, la marca no tardó en seguir el movimiento, hasta que fabricó relojes de aviador para el ejército junto a Stowa, Laco, Wempe e IWC.

Pero como todas las fábricas de la ciudad, A. Lange & Söhne no fue una excepción a las sucesivas crisis y a la unificación de las fábricas en 1951.

En la caída del muro de Berlín, un empresario, Günter Blümlein, propietario (y salvador) de la CBI y Jaeger-Lecoultre, encendió la mecha: se puso en contacto con Walter Lange para que le ayudara a reconstruir el legado familiar que su abuelo había fundado hasta el día de hoy, 145 años antes.

Los empleados fueron reclutados en el famoso pueblo y luego entrenados en la CBI para aprender a decorar los movimientos con el nivel de sofisticación y complejidad que la marca quería lograr.

Desde la presentación de sus primeras 4 piezas (Lange 1, Saxonia, Arkade y Tourbillon pour le Mérite) en 1994, el mundo de la relojería se sorprendió por su diseño y su nivel de decoración.

No pasó mucho tiempo antes de que la marca se convirtiera en una de las mayores referencias de la alta relojería.

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Chronoswiss

Otro fabricante alemán se ha liberado de las limitaciones nacionales y sigue establecido en su país de origen, Chronoswiss.

Aunque la marca puede indicar que es de origen suizo, este fabricante de relojes fundó su sede en Múnich a principios de los años ochenta.

Su visionario fundador, Gerd-Rüdiger Lang, se enfrentó a la «llamada» crisis del cuarzo y se basó exclusivamente en componentes mecánicos para la fabricación de sus relojes.

Chronoswiss pudo llevar la etiqueta «Swiss made» porque procedían principalmente de Suiza.

Chronoswiss debería ser eliminada de la lista, ya que la sede de la empresa se trasladó a Lucerna, Suiza, en 2012.

Sin embargo, queríamos asociar a esta empresa alemana con este artículo, cuyas colecciones como Sirius, Timemaster y Regulator son conocidas por sus características coronas tipo cebolla, cristales de moleteado y pasadores atornillados de «resorte».

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Relojes alemanes baratos

Tampoco tienes que gastarte grandes sumas para conseguir un bonito reloj alemán.

Aquí te mostramos algunos relojes que oscilan entre 100 y 300 euros.

Preguntas frecuentes

¿Son buenos los relojes alemanes?

Aunque poco conocida por el gran público, la relojería alemana ha ido ganando reputación poco a poco, apoyándose en valores estrictamente germánicos de exigencia y precisión. Emulada por la proximidad de su vecino suizo, la industria relojera teutona ha desarrollado una oferta alternativa al mercado suizo, basada en una excelente relación calidad/precio, que ha ido aumentando constantemente en los últimos años.

¿Cuáles son las marcas de relojes alemanes más importantes?

La relojería alemana está hoy dirigida por una industria bicéfala, con sede en el este del país, en Glashütte, donde se encuentran las sedes de las dos mayores marcas nacionales, una al lado de la otra: A. Lange & Söhne (parte del grupo Richemont), y el de Glashütte Original (parte del grupo Swatch). Fundada en 1845, A. Lange & Söhne vio su actividad interrumpida por la Segunda Guerra Mundial y la división de Alemania, antes de su resurrección en 1994. La marca Glashütte Original no nació oficialmente hasta principios de los años 90, pero la firma era una garantía de calidad ya a mediados del siglo XIX.

¿Son recomendables los relojes Nomos?

Nomos es una marca unánimemente aclamada por sus modelos minimalistas inspirados en el movimiento de la Bauhaus, nos encontramos ante una manufactura que respira calidad. Los modelos son originales y muy bonitos.

Otras marcas de relojes alemanes

A

  • A. Mantei
  • Alexander Shorokhoff
  • Almanus
  • Archimede
  • Arctos Elite
  • Aristo
  • Askania Uhren
  • Autran & Viala

B

  • Bethge & Söhne
  • Blancier (Lottermann & Söhne)
  • Botta Design
  • Brior Uhren
  • Bruno Söhnle

C

  • Christian Klings
  • Churpfälzische UhrenManufactur
  • C.H. Wolf Glashütte
  • Costro

D

  • Damasko
  • Defakto
  • Deutsche Uhrenfabrik
  • Dievas
  • D. Dornblüth & Söhn
  • D. Malchert Quedlindburg
  • Dugena

E

  • Elysee
  • Erbprinz
  • Erwin Sattler

G

  • Gardé Ruhla Uhren
  • Genesis
  • Genius 1953
  • George J. Von Burg
  • Germano & Walter
  • Guinand
  • Greve Uhrendesign
  • Grieb & Benzinger

H

  • Hanhart
  • Hacher Watches
  • Henschel Hamburg
  • Hummel Uhren

J

  • Jacques Etoile
  • Jochen Benzinger
  • Junkers

K

  • Kaventsmann Watches
  • Kemmner Watches
  • Kienzle Uhren
  • Kronsegler
  • Kudoke

L

  • Laco
  • Lang & Heyne
  • Lehmann Uhren
  • Leinfelder Uhren
  • Leumas Köln
  • Limes
  • Lowin Cologne

M

  • Maximilian
  • Mechanische Zeitinstrumente
  • Mercure
  • Messerschmitt
  • Moritz Grossmann Glashütte
  • M.Schneider & Co

N

  • Nauticfish
  • Neuhaus
  • Nienaber Bünde
  • Niessing
  • Nivrel

O

  • Ornatus Watches

P

  • Philippe Rosen

R

  • Rainer Brand

S

  • Schäuble & Söhne
  • Schauer
  • Schaumburg Watch
  • Stefan Kudoke Watches
  • Sternberg Uhren
  • Steinhart

T

  • Temption Watches
  • Thomas Ninchritz
  • Torsten Nagengast Timeline
  • Tourby
  • Tutima Glashütte

U

  • Uhrenwerft Hamburg
  • UTS München

V

  • Vintage VDB
  • Volker Vyskocil
  • Vollmer

W

  • Walther
  • Wempe
  • Wilhelm Rieber

Z

  • Zeppelin
  • Zib Uhrenatelier
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